martes, octubre 10, 2006



Entregar el Testigo

Algo que siempre me ha asombrado en mi trabajo en el mundo público chileno es como llega un nuevo director, un nuevo ministro, un subsecretario y no hay tiempo de compartir con el anterior, de decirse las cosas que debe tener en cuenta, de comentar la línea que debe seguir, de hablar de las lecciones aprendidas. Llegan del mismo partido, de la misma coalición y el "testigo" se entrega en una reunión protocolar donde se apilan unas carpetas en las que están los informes de gestión.

Debo decir que ha sido en el cambio de equipo de gobierno de este año donde he vivido una experiencia diferente en la sustitución del Fiscal del BancoEstado. La excepción confirma la regla.

Por eso en el taller de la Gerencia Media de CADAFE al que me he referido en mi post anterior, cuando todo el Comité Ejecutivo fue a inaugurar el Taller y esta foto no sólo fue una instántanea para la prensa, sino un momento lleno de contenido, de emoción afectuosa y declaraciones de equipo, no pude por menos que dirigirme a la sala para decirles: "Muchos de ustedes creen que una vez más la nueva administración vendrá con sus planes y el proyecto en el que estamos quedará abortado, pueden pensarlo, la experiencia les avala, pero ¿Alguna vez vieron una imagen como está?" Un "No" rotundo respondió "Entonces pueden dejar un espacio para confiar, porque esta es una imagen inédita en CADAFE, y cuando visitamos lo inédito, todo es posible, incluso lo anhelado, lo que quienes estamos aquí queremos que suceda".

Es absurdo creer que repitiendo las mismas acciones vamos a lograr un resultado distinto. Hemos oído esto muchas veces. ¿No es legítimo, entonces, que cuando hacemos cosas nuevas podamos vivir nuevas realidades?

Surgen preguntas para el coaching ¿Qué decisión nueva vas a tomar? ¿Qué acción emprenderás que hasta ahora no hayas puesto en marcha? ¿Qué actitud diferente vas a tener ante la situación que vienes arrastrando?

Formulo las preguntas y tengo la tentación de contestarme, siempre la propia vida se enreda con lo que la vista percibe fuera, pero no me desviaré, lo que he querido resaltar es esta experiencia en la que se entregaron el "testigo del poder", pero quedaron enlazados los dedos compañeros en un apretón de manos, para seguir trabajando juntos por la misma causa.

Y esta fue una fotografía que los empleados de la empresa pública venezolana nunca habían visto antes. Merece la pena subirla a mi blog.

2 comentarios:

  1. que hermoso trabajo Juan. Sobre las preguntas, me las apropio, jaja, las necesito.

    si hacemos distinto, tendremos resultados diferentes, que inmenso espacio se abre, para crear.

    Gracias,
    Iris

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  2. Anónimo8:56 p. m.

    Gracias Juan
    Bonita la experiencia, y me lleva a pensar que los blogs corporativos pueden ser una útil herramienta para pasar el bastón del mando, ahí están las conversaciones que son posibles de heredar
    Un abrazo

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