domingo, diciembre 26, 2010

La tarea de cambiar los propios paradigmas



Estamos casi todos de acuerdo que los límites de una organización los ponen las competencias de sus directivos y que en esas competencias tienen cada vez mayor peso las habilidades blandas. Sabemos también, que esas habilidades no se aprenden leyendo o memorizando, que requieren de una transformación más compleja e interior, porque en muchas ocasiones debemos cambiar paradigmas que han echado sus raíces de cal en nuestra forma de pensar y forman parte de nosotros, parece, incluso, que somos nosotros.

El drama es que cada vez el mundo nos envía señales de que los cambios llevan una velocidad difícil de seguir, se revalorizan las materias primas que iban a ser commodities y no servirían para competir, la sociedad del conocimiento se resuelve en los retail, Facebook llega a 550 millones de seguidores, wikileaks pone en evidencia que vivimos en la mentira gubernamental, El dólar se evapora lentamente, media Europa necesita ser rescatada de la burbuja de haber elevado sus niveles de vida sin productividad que lo respalde. Leer los diarios empieza a ser un acto masoquista ¿Alcanzaremos a cambiar los paradigmas para no vernos arrasados por una dinámica inmanejable?


Margaret Weatley escribía en su excelente libro" El liderazgo y la nueva conciencia" allá por 1.992 "Hace 300 años, cuando el mundo se veía como una máquina exquisita puesta en marcha por Dios –un sistema cerrado con un padre relojero que luego abandonó la tienda- el concepto de entropía entró en nuestra conciencia colectiva. Las máquinas se gastan". Así es, hoy ya no podemos ver ni el universo, ni nuestro planeta, ni nuestras organizaciones como máquinas que podemos diseñar con mapas de circuitos precisos. El paradigma ingeniero o economista es insuficiente, las organizaciones tienen necesidades de ingeniería, pero también de biología, de física, de psicología, de valores y sentimientos y sobre todo requieren de una actitud distinta que permita una forma de observarlas abierta, desapegada, capaz de desentenderlas y reentenderlas.

Hay veces que la tarea me parece titánica y que eventos como los que he mencionado más arriba me hacen creer que son la evidencia de una cierta incapacidad de gobierno del sistema, otras veces (por fortuna la mayoría) confío en ese concepto subyacente en la morfogénesis, es decir que hay una memoria que se traspasa en los genes y que acelera el aprendizaje de las especies y espero que las nuevas generaciones reciban este impulso de nuevos paradigmas. Algo así como que se está formando un dropbox de nuevos conocimientos para subsistir en otro ecosistema ¿Existirán nubes donde el espíritu se acumula, donde se está almacenando el conocimiento sustancial o es una ilusión que tenemos los optimistas esenciales?


Me da confianza que un estudioso como Henry Mintzberg dijera en el Congreso de Recursos Humanos de Toronto, según nos twiteó Ignacio Fernández hace unas semanas, que en el futuro las organizaciones deberán funcionar como comunidades de conocimiento, de pensamiento y valores. Me da confianza porque eso supone entender que la complejidad requiere de una nueva conciencia. Y eso es lo que pienso que necesitamos: una nueva conciencia interconectada que instale la épica de los momentos difíciles, capaz de equilibrar un gran propósito con la diversidad de enfoques y de posibilidades de implementación.

Aplicar los métodos de planificación tradicionales sirve hoy de poco, aun siendo elogiable la intención, la pretensión de tenerlo todo claro, de explicar la realidad completa en un mapa, de encontrar el zahir borgiano que resuma el comportamiento del universo me aparece como la ingenuidad del niño que trata de ganarle el balón al padre futbolista, de noquear al boxeador con sus voluntariosos puñetazos pequeños ¿No sería mejor que en vez de competir se preguntara por la experiencia que debe desarrollar para lograr el impacto que hoy no logra, por la comprensión que requiere, por el ángulo que precisa?

Los simples gestores se agotan cuando la realidad viene a contradecir los éxitos de ayer, necesitamos incorporar la confusión y lo incierto como un ingrediente de un mundo vivo.
Sé que doy vueltas a una misma noria, pero creo que tiene sentido volver y volver a la idea de un líder que se acepta en permanente desarrollo, que no se desespera, que abandona la arrogancia de creerse construido y decide escuchar, aprender y sentir, eligiéndolo como su mejor estrategia.



miércoles, septiembre 29, 2010

La felicidad en las organizaciones


La ICF de Chile organiza su IV Congreso con el título de "Coaching, Empresa y Felicidad" y su actual directorio ha vuelto a tener la gentileza de invitarme a realizar un taller, en esta ocasión sobre la felicidad en la empresa. He elegido como enfoque "El directivo como constructor de felicidad" por varias razones:

  1. Porque creo que las personas buscamos indefectiblemente la felicidad en nuestras vidas y la vida no es lo que ocurre fuera del trabajo, sino la experiencia completa del vivir.
  2. Porque pasamos buena parte de esa vida en el trabajo.
  3. Porque cuando somos felices damos lo mejor de nosotros mismos y ese "dar" resulta mejor para los propios fines de una empresa humana.
  4. Porque son los directivos los principales constructores de espacios para que las cosas ocurran y, por tanto, pueden catalizar el logro de una mayor felicidad de las personas o desentenderse de ese rol considerando que no es su Misión.
Mi tesis será la demostración de que colaborar en la felicidad de las personas es una estrategia que da buenos resultados con independencia de que en si misma sea humanizadora y moral, siendo este el fin más importante. Esto significa distinguir entre felicidad y bienestar.


Acompañar el proceso de generar las condiciones para que la felicidad de quienes trabajan en la organización sea más posible, es una buena tarea para el coach de directivos. De eso hablaré, de algunos factores para la felicidad laboral y de cómo desde la dirección se puede propiciar su existencia.

La cita es el 5 de noviembre el hotel Atton como puenden ver en este LINK

domingo, agosto 15, 2010

Sobre Creatividad (2)

Incorporo el vídeo de Ken Robinson para facilitar su visualización



Finalmente son los sistemas educativos los que forman a los ciudadanos del futuro, detenernos en ellos, poner el énfasis en quienes enseñan, para que no sean obstáculos para quienes aprenden, resulta ser la más importante de las tareas de los gobiernos, las comunidades y de esta profesión del coaching.

martes, agosto 10, 2010

Somos educados para perder la creatividad


  La frase que da origen al título de este artículo pertenece a Ken Robinson, un experto en educación y arte, que fue ordenado caballero en Inglaterra por su contribución al sistema educativo, debemos llamarlo, por lo tanto Sir Ken Robinson. Tengo el prejuicio de pensar que los "Sir" son tipos engolados, pero este es uno de esos casos (hay varios) en que la Reina de Inglaterra hizo una concesión al buen humor, o a lo mejor ni se enteró y es un simple error del sistema.



Hace unos días envié un link de Youtube a toda mi familia para que vieran el vídeo "¿Matan las escuelas la creatividad?" del citado Sir. Encontré que debía hacerlo urgentemente dado que ya hay una nueva generación que aún no llega a los 8 años, por lo tanto se encuentra en alto riesgo de que les maten el espíritu creativo y les conviertan en niños adecuados, es decir, mediocres. 

domingo, agosto 08, 2010

Sobre Creatividad (1)



Vivimos en un mundo en el que avanzar, diferenciarse, lograr el desarrollo requiere de creatividad, de nuevas perspectivas y sin embargo en las organizaciones se cultiva hacer las cosas como siempre se han hecho, en la educación los mas refractarios a lo nuevo son los profesores, en la gestión buena parte de los directivos son los que frenan la creatividad.

En estas semanas de forzado retiro he leído, visto, pensado en este tema varias veces. Tal vez porque una de mis últimas actividades antes de la operacíon a la que fui sometido fue la de presentar a Marco Antonio de la Parra en uno de los grupos del BancoEstado con los que colaboro más activamente.

Quiero dedicar este post a recoger algunas de las ideas que Marco Antonio propuso en esa conferencia a un auditorio lleno. Estas frases no son textuales, reflejan mi propia interpetación de lo que dijo, a veces yendo más allá de su intención, tal vez, o reflejando mis propias ideas.

viernes, julio 09, 2010

Necesitamos tener un DESAFíO




Se dice que no hay mejor maestro que la adversidad. Aunque suela vivirse como un proceso difícil, incómodo y doloroso, muchas personas reconocen que gracias a sus conflictos existenciales han conectado con una fortaleza interior que desconocían. Y no sólo eso. En ocasiones, la experiencia del sufrimiento y el malestar les ha llevado a replantearse por completo su vida; a cuestionarse sus creencias y sus valores, y a cambiar así su manera de ver y de relacionarse con el mundo.”



Borja Vilaseca planteaba así esta idea, que se viene manifestando desde el principio de los tiempos de la humanidad, en su artículo “¿Quién manda en mi vida?” publicado en el diario El País, el 3 de enero de este año. En algún arte de dirigir anterior ya hemos reflexionado sobre el valor de la adversidad y los conflictos, a partir de otras miradas como la de Halverson o Víctor Frankl, por eso hoy quiero replantear esta situación desde el enfoque del coaching  ¿Cómo puede el directivo con distinciones de coaching aprovechar la adversidad para generar un desafío que convoque la fuerza de su equipo, la mejor entrega, la posibilidad de sentirse importantes?

domingo, julio 04, 2010

Lograr el compromiso, lograr la Mística


Suele ser un anhelo en las organizaciones ¿Cómo lograr que la gente se comprometa?. También es una aspiración de los directivos con los que trabajo: que sus equipos tengan mística, que estén dispuestos a un esfuerzo superior por aquello que hacen. Cuando no ocurre lo viven como un quiebre para la organización y para el directivo.

Sobre esto escribí uno de los artículos de "El arte de Dirigir", pueden encontrarlo en la solapa superior que lleva este  nombre, en el archivo del 2009 en Diciembre. Vuelvo a ello hoy después de una conversación de coaching de esta semana, para anotar una idea más: el compromiso se modela, es contagioso, vive también como una emoción colectiva y una forma de ponerlo en marcha es desarrollando el afecto dentro de los grupos, haciendo que los miembros de un grupo vean lo mejor que hay en los otros. De esto también hemos hablado.

¿Qué es lo nuevo, entonces? Tal vez nada lo sea, simplemente que de pronto me ha parecido poderosa la reflexión de que es en la falta de compromiso, en su raíz, donde podemos encontrar el camino del compromiso. Me ha venido a la mente una frase de César Piqueras, en su libro "El jardinero en la Empresa": "La sombra es el lugar donde está el aprendizaje". Investigar el por qué las personas no se comprometen. A partir de ahí podemos encontrar los tres caminos que proponía en ese artículo de "El arte de Dirigir": 


  • Buscar que las personas se conecten consigo mismos, mostrar si se han perdido en el camino, porque
    nadie que este desconectado de sí mismo puede comprometerse en algo.
  • Vover a poner brillo en el proyecto de equipo, o de organización, porque las personas quieren sentirse parte de algo importante, las rutinas terminan con los compromisos, lo mecánico se aleja del corazón.
  • Hacer ver el impacto que en otros tiene cuando no hacemos con excelencia lo que debemos hacer, desde llegar tarde a una cita a contraer una enfermedad por falta de higiene. Es importante la conciencia de que lo que hacemos afecta al mundo.
Cuando no nos damos tiempo para esto el resultado no puede ser otro que tengamos equipos donde el alineamiento dependerá del momento de cada persona, de forma aleatoría y con el tiempo será escaso.

Por eso me alegré cuando al finalizar el coaching que dio lugar a este post, mi coachee dijo:

- Entonces si te entiendo bien me estás diciendo que la Mística se gestiona.
- Entiendes bien, es lo que sinceramente creo -respondí.

viernes, junio 18, 2010

Enseño cuando aprendes y no al revés

Enseñarás a volar
pero no volarán tu vuelo.

Enseñarás a soñar,
pero no soñarán tu sueño.

Enseñarás a vivir,
pero no vivirán tu vida.

Sin embargo...
en cada vuelo,
en cada vida,
en cada sueño,
perdurará siempre la huella
del camino enseñado.

Teresa de Calcuta

Cuando leo estos versos de la Madre Teresa de Calcuta pienso en los líderes, en los maestros, en los profesores, en los padres que nos han marcado. Su grandeza fue la de intentar conducir sin quitarnos autonomía.

En esa libertad está la diferencia entre la disposición de enseñar y la experiencia de aprender, una experiencia que le pertenece al otro.

Sólo es cierto el verbo de enseñar cuando el otro aprende. El aprendiz constituye al maestro. Tal vez nuestro aprendizaje sea el de saber mirar al que queremos que aprenda con la atención que hay que dar al auténtico protagonista.

miércoles, junio 16, 2010

Esa necesidad de creer


Se ha repetido en varios de mis últimos coaching, aparece como un quiebre revestido de otras formas. El contexto es la dificultad para producir cambios. Solemos estar de acuerdo ya con mis coachees en que sólo cambian las prácticas cuando cambian las creencias. Esto ya lo hemos dicho muchas veces, sin embargo cuando abordamos situaciones concretas es fácil adjudicar la resistencia a una intención. "Se resisten o nos resistimos porque...y abrimos una intención en contra".

A estas alturas mi interpretación es que el principal obstáculo para los cambios es que no creemos suficientemente en nosotros mismos, en nuestra capacidad de ser flexibles, de aprender, de superarnos.

Pero hay una ventaja que subyace en todos esos mismos procesos: necesitamos creer para estar vivos. Con esa necesidad debe conectarse el coach, como con esa necesidad se conecta el líder.

Hoy lo comprobamos cuando avanza el descreimiento en la política, en las instituciones o en la religión y al mismo tiempo avanzan las creencias exotéricas, las comunidades, las tribus. Necesitamos creer en algo.

A todos nos gustaría creer en nuestra empresa, en nuestros dirigentes, en nuestra familia, en nosotros mismos.

Piensa en la poderosa palanca que eso nos da para mover el mundo.

sábado, junio 12, 2010

Tener la identidad para tener la imagen

El ARTE  de DIRIGIR N° 72


"Los sapos ven solo contornos, cambios de luminosidad y masas…es lo que necesitan para sobrevivir”. Escribe el famoso director de orquesta Benjamin Zander en un artículo en el que también él acude a la teoría del observador para referirse a las interpretaciones en las que vivimos.



Ya hace muchos años (1993) que escuché en mi primer contacto con el coaching a Rafael Echeverría que repasando la filosofía del siglo 20 nos decía: No podemos intervenir en un mundo que no sabemos observar. ¡Cuántas veces desde entonces he citado esa frase! Y hoy me refiero a ella porque en las últimas semanas he tenido que intervenir en varios foros para hablar sobre “Coaching y Política” y aparece recurrentemente el juicio de que a los políticos o a quienes ejercen la función pública no les interesa el coaching como una forma de desarrollar sus habilidades. Se suele aludir a su incapacidad para auto observar sus áreas de mejora.  Discrepo de esa opinión.


jueves, junio 10, 2010

Tiempo de pensar


Reconozco el abandono al que he sometido a este blog en el que he venido dejando mis ideas y creencias sobre el coaching y el arte de dirigir. Llamaré al tiempo de silencio, tiempo de pensar, tiempo de dejar la huella en mis cuadernos inseparables en los viajes, el pequeño Moleskine negro de tantos aeropuertos.

Regreso con este nuevo diseño al que me está ayudando Gabriel Bunster tan preocupado siempre porque sus amigos accedamos bien a la tecnología y en las próximas semanas iré volcando las ideas acumuladas en mis últimos talleres, presentaciones en congresos, coaching y lecturas.


Tengo ante mi el libro de mi amiga Pilar Jericó "Héroes Cotidianos" con el subtítulo "Descubre el valor que llevas dentro", un subtítulo que me resuena cuando vengo de trabajar en la Gestión de Sí mismo en un Programa de Directivos en Margarita.

Además Pilar me ha enviado un mail con la dirección de su blog en la que hace un resumen a través de un armonioso conjunto de slides que amerita que quienes vienen a visitarr mi blog lo conozcan. Ese es el motivo de esta nota de hoy. Veanlo

sábado, marzo 27, 2010

Liderando el Futuro, construyendo el Presente





Me pidieron que me encargara de escribir sobre el Liderazgo emergente para el último número de la Revista Desafío y este fue mi artículo que recoge las ideas que he venido exponiendo en mis últimas columnas. Copio:

"Charles Handy en uno de sus mejores papers termina diciendo “Lo mejor del futuro es que podemos darle forma” y en esa capacidad de influir que el ser humano tiene y en la voluntad de querer usarla reside, a mi juicio, el poder del liderazgo.

Podemos hacer mejores organizaciones para un futuro que queremos mejor, desde nuestra vida de hoy, la única, por cierto, que tenemos. También podemos errar y retroceder a formas menos humanas, vivimos tiempos difíciles. Como en cada situación de la vida podemos irnos por un camino o por otro. Quiero hablar del camino que me gusta y no solo porque me gusta, sino porque creo que es el que llegará si permitimos salir lo mejor que el género humano tiene en su corazón.